De la mano del escritor “Jack Ketchum” nos citamos en la época de los 50’s.
Otro suburbio más de los Estados Unidos que podríamos decir “normal” si no fuera por la historia que nosotros como espectadores leeremos.
La historia realmente va desde la perspectiva de nuestro protagonista que conocemos como David varios años después ya estando en su “actualidad” como otro adulto más, recordando este suceso que podríamos decir lo dejó marcado hasta sus días.
Volviendo a los años 50’ David, siendo un pre-adolescente tiene una vida normal, con amigos “normales”, una infancia que podríamos decir normal hasta el día que llegan dos hermanas a su barrio, Susan, la menor; y Meg, la mayor, ésta teniendo dos años más que el protagonista. Ambas hermanas quedando huérfanas y a cargo de la familia Chandler. Siendo la responsable de éstas dos huérfanas, Ruth, madre de varones, y amigos de David, su vecino.
Al principio todo es tranquilo, hasta que poco a poco nos vamos adentrando al mundo de Ruth, o mejor dicho, a su inestable cabeza de cómo deberían ser las mujeres ante su “sabiduría” desquitándose ésta con la mayor de las hermanas huérfanas, Meg. Podemos ver en el transcurso de todo el libro como Meg es maltratada tanto física, psicológica y sexualmente, viviendo en el sótano en estado deteriorable de los Chandler, amordazada, sin luz, a veces sin comer ni poder tomar agua, atada de pies y manos. Aguantando por su hermana menor Susan (Dato no mencionado anteriormente, Susan, es tullida) para que no tuviera que pasar por lo mismo. Lastimosamente habrán pocos momentos, pero Susan no logrará zafar de los castigos de Ruth.
A medida que vamos avanzando con los castigos, vamos avanzando con los integrantes. Comenzando con Ruth, incorporándose sus hijos y finalmente uniéndose todos los chicos presentes de dicho barrio. Ahora, nos preguntamos ¿Qué hace nuestro protagonista David? Nada. Bueno, nada que pudiera ayudar a que detengan la tortura que estaban viviendo las hermanas. Aunque Meg y David eran más cercanos, podemos leer los pensamientos del protagonista, quien siente la necesidad de salvar a Meg, así como también ve de forma excitante los maltratos hacia ella. Se podría decir que estaba enamorado de ella, pero en varios párrafos podemos sentir que es más atracción sexual lo que siente por esta chica.
Mientras más nos vamos adentrando en el libro, más explícito se pone nuestro autor con las palabras, llegando a sentir más de un cosquilleo por dolor al sentirte como una de las dos hermanas. Y esto es lo que justamente me gustó del libro, tal vez muchas personas lo critiquen por lo fuerte que puede llegar a ser varias de estas hojas. Pero sentirte en el lugar de los personajes es algo que pocos escritores logran, y por más que la sensación que te da esta historia justamente es horrible, lo mismo entra en mi categoría. Debo elogiar a Jack Ketchum por tremendo libro que no podes soltar una vez que te adentras por la curiosidad.
Sylvia Likens – Historia en la que fue basada
Como bonus extra hablemos un poco de Sylvia Likens, ya que su historia fue fruto de inspiración para este libro. Las historias no cambian mucho, las dos tienen el mismo trágico final, la protagonista muere después de tantas torturas.
Sylvia Likens (03/01/1949) fue una adolescente de 16 años, torturada durante cuatro meses hasta su brutal muerte el 26/10/1965.
Sylvia y su hermana menor Jenny (Ésta utilizando un aparato ortopédico de acero en la pierna, debido a que la polio provocó que una de sus piernas fuera más débil que la otra) fueron enviadas por sus padres quienes debían viajar a ferias por trabajo a casa de Gertrude Baniszewski, quien las cuidaría con el costo de 20 dólares cada semana por el cuidado de las dos hermanas.
Todo fue normal hasta que comenzaron los supuestos problemas, Sylvia atraía bastante a los chicos por su carisma y belleza. Hasta que una de las hijas de Gertrude, Paula, comenzó a odiarla. Todo este odio se fue acumulando hasta que la “bomba” explotó la semana en que a Gertrude no recibió su pago semanal de veinte dólares, así comenzando con la tortura que llevaría hasta la muerte a la joven Sylvia de en ese entonces 16 años.
Por si se lo preguntan, el pago sólo fue demora de esa vez, Gertrude siguió cobrando mientras torturaba a las hermanas, en especial a Sylvia
Por Yuliana
💀
Asnos estúpidos de Isaac Asimov
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